Reseña: Jaque Perpetuo
Escrito por Loup Durand, relata la historia de un niño llamado Thomas, a quien el día de su cumple años numero 11 un grupo de alemanes llega a su casa para secuestrarlo.
Thomas resultaba ser el contenedor de una inmensa cantidad de información sobre las cuentas bancarias de varios judíos que decidieron proteger sus bienes. En el pasado cuando la guerra apenas comenzaba, el bisabuelo de Thomas era el poseedor de esa información pero él sabía que no duraría mucho tiempo vivo así que le otorgó esa información a su nieta, María Weber, después se suicidó.
María, la madre de Thomas lo crió como si fuera un adulto, lo entrenó para aprenderse todos y cada uno de los nombres y códigos de las cuentas bancarias. La misión de Thomas era llevar toda esa información a un banco si las cosas se volvían peligrosas, y así comenzó su persecución. Escapando junto a sus guardaespaldas españoles, saltando de una ciudad a otra, de un país a otro, escapando del "hombre de sombrero amarillo" y los nazis, conociendo a su padre y sobre todo luchado contra el miedo que un niño 11 años debería tener, deseando el calor de su madre y rogando por que todo termine pronto.
Thomas resultaba ser el contenedor de una inmensa cantidad de información sobre las cuentas bancarias de varios judíos que decidieron proteger sus bienes. En el pasado cuando la guerra apenas comenzaba, el bisabuelo de Thomas era el poseedor de esa información pero él sabía que no duraría mucho tiempo vivo así que le otorgó esa información a su nieta, María Weber, después se suicidó.
María, la madre de Thomas lo crió como si fuera un adulto, lo entrenó para aprenderse todos y cada uno de los nombres y códigos de las cuentas bancarias. La misión de Thomas era llevar toda esa información a un banco si las cosas se volvían peligrosas, y así comenzó su persecución. Escapando junto a sus guardaespaldas españoles, saltando de una ciudad a otra, de un país a otro, escapando del "hombre de sombrero amarillo" y los nazis, conociendo a su padre y sobre todo luchado contra el miedo que un niño 11 años debería tener, deseando el calor de su madre y rogando por que todo termine pronto.
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